viernes, 10 de diciembre de 2010

Columna: ¿Seré Gay?


Creo que esta pregunta se la habrá realizado más de algún estudiante perteneciente a colegios cristianos - católicos masculinos, durante toda su etapa escolar. ¿Por qué lo creo?, porque en estos colegios no se habla de sexo como un acto de acercamiento íntimo entre un hombre y una mujer capaces de alcanzar placer a través del mismo, sino que se les habla de sexo como un aparato reproductor procreador y conservador de las familias establecidas bajo el vínculo marital.
Entonces debemos imaginarnos a los púber en pleno proceso de desarrollo y despertar sexual, con sus hormonas todas revolucionadas en una jornada escolar infinita rodeados de sus pares masculinos. Y curitas como el Santo Karadima, haciéndoles clases, reprimiendo cualquier manifestación de conductas supuestamente inapropiadas a los ojos de Dios, y después los ven coqueteando con cualquier estudiante del colegio. Esto no hará que se cuestionen su sexualidad.
Pero no siempre es así, tampoco hay que encasillar a todos los colegios masculinos cristianos en estos casos. Estamos viviendo una etapa en la Historia de la Humanidad en que los medios se encuentran saturados de sexo en cada minuto, el grupo Los Prisioneros lo dijo: “el mejor gancho comercial”. Y los colegios de este tipo pretenden aún cerrar los ojos a una realidad como esta. Internet se presta como propagador a veces incorrecto de la enseñanza sexual que podrían brindar los establecimientos a lo largo del país, pero lamentablemente el peso de la Iglesia Católica no deja que los jóvenes aprendan a usar correctamente un condón, y menos hablarán de sexo como tal en las aulas de colegios cristianos masculinos. Más aún, bajo el gobierno actual quien debe tratar temas como estos y ponerlos en la mesa para debatir es un Opus Dei, pro vida anti condón, contrario al sexo prenupcial, contra el diccionario del sexo on line en los colegios, etc.
Según el destacado historiador chileno Gabriel Salazar en una entrevista realizada por la Revista Qué pasa, en septiembre del 2010, nos entrega datos de alto calibre, entre otros temas, acerca del alto porcentaje de madres solteras en el país, desplazando a Suecia  en relación al número de madres solteras en el mundo, quedando en un primer lugar a nivel mundial. Pero si los jóvenes no reciben la educación sexual que se merecen en sus colegios masculinos cristianos y en todo tipo de establecimientos, qué sabrán de hacerse cargo de una relación sexual con consecuencia de embarazo.
Haira León Lemus

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